sábado, 6 de febrero de 2010

Nunca.

No voy a dejar nunca de hablar antes de pensar, tampoco de pararme frente a la ventana y mirar las nubes, atraz del techo de chapa. No voy a dejar de reírme, aunque este triste. Y nunca se van a dar cuenta. No voy a dejar de mirarlos, de reírme, de mirarlos, de sonreirles, y nunca van a dejar de ser mis chiquitos. Tampoco voy a dejar de comer dulce de leche del tarro, y con cuchara grande.
Voy hacer mas de una carrera, hasta encontrar la que me guste, y voy hacer mas de una, porque nada me va a gustar de entrada. Voy a tener un casamiento convencional, y años mas tarde, me voy arrepentir.
Cuando mi viejo cumpla 70, le voy hacer una fiesta sorpresa, y a mi mama no, porque a ella no le gusta.
Voy a ir a Francia, y voy a volver a los 10 años, voy a mirar Montevideo, y me voy a ir.
Voy a seguir cocinando, y me va a seguir saliendo todo mal, porque eso es raro que cambie.
Voy a mirar películas una y otra vez, hasta que me canse, pero sinceramente, pienso que nunca me voy a cansan de quererte.

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